EL FIN DE LOS TIEMPOS
Mucho se habló durante bastante tiempo acerca del año 2000, ya sé que pasó hace rato pero vean mi punto primero, de que sería el fin de la historia y si no de almenos del mundo como lo conocemos, muchos salieron entonces enarbolando banderas y freses mileniaristas de ”el fin está aquí” “llegó el fin de los tiempos” y esas cosas, algunos más extremos como Paco Rabanne se escondieron en un bunquer a aguardar el esperado cataclismo, este fenómeno se propagó a nivel mundial, tal vez impulsado por el llamado efecto Y2K, el cual decía que las computadoras que poseían un sistema de calendario basado en 2 dígitos, no reconocerían el doble cero como año 2000, sino como una vuelta atrás en el tiempo, con todas las consecuencias de pérdida de información y control sobre las mismas computadoras, pero lo temían en mayor parte los bancos, compañías de seguros, y todos quienes tuviesen algún tipo de base de datos con referencia fundamental en el calendario.
La historia demostró después lo infundados de estos temores y de lo fácil que era prevenir cualquier efecto adverso.
Pero volvamos al año 2000 y en su efecto sobre las mentes del común de las personas, de sus temores no porque su cuenta bancaria no existiera, ni porque su póliza de seguros hubiese expirado, sino de los temores sobre la continuidad de su vida y de la vida como la conocía, del inexorable conocimiento de la cercanía del fin, esto como decía involucró a casi toda la humanidad o almenos a gran parte de la civilizada, no distinguiendo credos, razas, status social, ni cultural, no distinguiendo edades, ni experiencias, etc.
Frente a un fenómeno como este, me hago la pregunta ¿Como puede un acontecimiento que es ciento por ciento perteneciente a una religión específica, afectar al mundo entero? Lo digo porque creyentes y no creyentes se vieron involucrados en esta vorágine del fin de los tiempos, entonces como pueden laicos, ateos, judíos y budistas, creer que el mundo acabará el año 2000 si su historia es diferente radicalmente a la historia cristiana, si para ellos ésta carece de fundamentos lógicos, históricos y documentales que la acrediten como probable, como pueden creer en la esperanza de un mañana después del fin, sin caer en dogmatismos propios de la Iglesia Católica, como creer en la reencarnación luego de que han renegado de esta, creyendo que el fin será como está escrito en un libro que siquiera reconocen como válido.
Estas preguntas seguramente harán que reaccionen defensores de posturas muy divergentes a esta, pero antes de eso expongo una pregunta más, si la historia y la existencia humana ocurre como una serie de acontecimientos y renegando de la llegada de un fin como lo profetiza San Juan en el Apocalipsis, ¿Cómo es que a la historia se la concibe como una trayectoria hacia delante? Si vamos hacia delante hacia algún lado vamos entonces, sin destino no hay viaje, sin destino final no iríamos como raza a parte alguna y la historia ocurriría como una serie de fotografías estáticas sacadas a la realidad, la cual ocurriría como una serie de fotogramas en una película... vean ustedes...
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